Reformas de viviendas unifamiliares

Reformas más comunes en viviendas unifamiliares

Comprar una vivienda unifamiliar es siempre una gran decisión que no suele defraudar a quien la toma. Son casas espaciosas y muy agradables, en las que se vive con mayor independencia y muy adecuadas para familias con hijos.

A menudo comprar una vivienda de este tipo en una urbanización supone estar dispuesto a completar todos aquellos aspectos de la casa que, por ahorrar costes, los promotores de vivienda suelen dejar con acabados de inferior calidad o directamente sin terminar.

Suelen precisar reformas la buhardilla, el garaje y el jardín.... Eso sin contar que se quieran realizar mejoras como poner rejas en ventanas, cambiar las puertas de acceso, construir una piscina o acristalar la entrada a la casa o alguna terraza de poco uso.

Es frecuente que la buhardilla se entregue sin acabados ni ventanas, que el garaje en superficie no se entregue techado ni terminado, y que sea necesario cambiar o automatizar la puerta de acceso, que haya que instalar canalones en los tejados y que sea imperativo emprender obras para un mejor aprovechamiento del espacio al aire libre (pavimentar, hacer senderos, un porche…).

Pero, ¡ojo! En las viviendas unifamiliares la posibilidad de reformas es ilimitada y el espacio disponible impide que se noten las molestias.... El resultado puede ser que periódicamente ‘estés de obras’ y, lo que es peor, que después de acometer una reforma o nueva instalación decidas cambiarla porque no te da el servicio que esperabas… ¡Dinero perdido!

Por eso, lo importante es planificar las obras de antemano. No son pocos los que se han percatado, tras instalar un toldo, de que en realidad preferían un porche techado; los que han puesto una pradera de césped cuando en realidad querían pavimentar el jardín, o quienes han techado el garaje cuando en realidad querían hacer un cerramiento completo…

Por eso, es importante observar la casa y tener claras las prioridades de lo que necesitas en ella. Observa cómo afecta el recorrido del sol a tu vivienda, qué tipo de uso darás a la buhardilla, qué espacio destinarás a trastero, si quieres dar al garaje un uso adicional como almacén y pequeño taller de bricolaje…

Lo ideal sería vivir un tiempo y luego decidir qué reformas necesita la casa, pero no siempre es posible. Consulta siempre tus necesidades y expectativas con un buen profesional de las reformas: están acostumbrado a dar soluciones interesantes a todo tipo de planteamientos por inusuales que parezcan.

Veamos ahora las reformas por partes:

Buhardilla:

- Piensa en primer lugar a qué estará destinado este espacio… ¿Deseas un espacio diáfano o bien delimitar zonas? ¿Será un espacio para juegos y multimedia? ¿Hará las veces de dormitorio? ¿Quieres tener un pequeño trastero?

- Ahora, piensa si la prefieres abierta al resto de la casa (muy bonita, pero con pérdidas de calor) o bien cerrada con su puerta.

- Prevé armarios o, mejor aún, módulos con ruedas, aprovechando la inclinación de los aleros.

- Estudia la posibilidad de poner ventanas de tejado tipo Velux o construir una mansarda (ventana que avanza hacia afuera desde el tejado) que te permita aprovechar más espacio en la caída de aguas.

- Ten en cuenta las necesidades de aislamiento de la planta bajo tejado, ya que suele acusar más que el resto de la casa las temperaturas extremas. Solicita información sobre los tipos de materiales aislantes que es posible poner bajo el techo y las paredes falsas aprovechando que necesitarás dar un acabado a las paredes. ¿Prefieres forrar con lamas de madera

para crear un ambiente acogedor o te decantas por paneles tipo pladur?.

- Piensa que necesitarás añadir radiadores y quizá un lavabo o cuarto de baño completo, por lo que habrá que hacer llegar hasta allí las redes de fontanería.

- Planifica las tomas de electricidad y teléfono que necesitarás.

Garaje:

- A menudo en las casas pareadas donde no hay planta sótano, el lateral de la parcela hace las veces de garaje. Quizá sólo te hayan dado un pérgola y coincida que ahí esta la puerta de salida de la cocina hacia el jardín…

- Pronto te darás cuenta de la necesidad de techar el garaje, y quizás también de cerrarlo completamente si deseas darle uso como despensa, trastero, etc.

- Probablemente también necesites automatizar la puerta del garaje o, si es de muy mala calidad, cambiarla por una puerta de forja corredera o bien una puerta de apertura plegada o tipo persiana.

Porche, pavimentos de exterior y senderos:

Te resultará muy cómodo disponer de zonas pavimentadas en las que poder instalar mesa y sillas a modo de comedor o salón de verano. Para ponerte a cubierto de miradas indiscretas tienes varias opciones: un tejado de obra, un toldo o una pérgola fija o plegable asentada sobre vigas y postes de madera. En casas aisladas o pareadas resulta muy cómodo disponer de un sendero perimetral alrededor de la casa.

Canalones en el tejado:

Son más necesarios de lo que parece en un principio. La lluvia cayendo ‘a mantas’ sobre las baldosas del jardín puede dejarte sin dormir más de una noche. Los canalones recogen el agua que vierte el tejado y la canalizan hasta un lugar apartado.
Necesitarás que te lo instalen profesionales acostumbrados a realizar trabajos en altura.

Aprovechar el hueco bajo la escalera:

No hay por qué dejar este espacio tan útil sin aprovechamiento: una despensa, un armario, un maletero…
Piensa en qué utilidad quieres darle y plantéaselo a tu experto en reformas.

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